Ámsterdam puede presumir de ser una de las capitales más comprometidas con el medio ambiente, una ciudad que apuesta con fuerza por el trasporte público y en bicicleta (no en vano es la ciudad más bici-friendly del mundo) y que se adorna con más de 200.000 árboles.
Dentro de ese respeto y cuidado a la naturaleza no podía faltar el gran pulmón verde de la ciudad, el parque más extenso de la misma, Vondelpark.
Ya hemos hablado de este parque cuando dábamos noticia de que las autoridades de Ámsterdam iban a permitir que las parejas hicieran el amor en Vondelpark. He de decir que no me topé con nadie haciendo uso de esa libertad, aunque claro, era mediodía y gran parte del parque, tal vez el más propicio para la intimidad, estaba cerrado por obras.
Y es que, debido a la gran afluencia de público, se están realizando renovaciones en los senderos y estanques que está previsto que finalicen en 2009.
En cualquier caso, pasear por Vondelpark resulta muy agradable, y a juzgar por el número de amsterdaneses que lo frecuentan, en bici, en patines, corriendo o caminando, bañando a los pequeños en su piscina o tomando algo en sus bares, el parque se convierte en un espacio de recreo muy apreciado para todos.
Este parque tiene unas 45 hectáreas de césped, arboleda y lagos, hay fauna y flora autóctona, hasta cien especies de vegetales diferentes y pequeños animales (ardillas, patos, cisnes...) y en verano podemos disfrutar de teatro y música al aire libre. En el centro del parque hay un bar restaurante con vistas estupendas a un estanque lleno de patos y rodeado de vegetación exuberante, aparte de otros cafés y puestecillos de helados...
Vondelpark fue creado en 1864 por el paisajista holandés Jan David Zocher y abierto al público en 1865, el primer parque urbano público de la ciudad. Posteriormente fue ampliado en 1874 por el hijo de Zocher. El nombre del parque proviene del poeta renacentistas Joost van den Vondel ("parque Vondel"), cuya estatua podemos ver en el interior de este gran espacio abierto, en el centro del parque.
Aunque en sus orígenes se enclavó en las afueras de la ciudad, una zona de granjas, en la actualidad el crecimiento de Ámsterdam lo ha alcanzado. Se sitúa junto a la maravillosa zona de los museos, la Museumplein, que sin duda recorreremos en nuestra visita a Ámsterdam, al Museo Van Gogh, al Rijkmuseum... Su puerta principal está frente al canal Singelgracht.
A diferencia de otros parques de la ciudad, en éste predomina el estilo inglés, y está recorrido por largos senderos y extensas praderas de hierba que suelen estar salpicadas por grupos de gente que se reúnen en este lugar o aprovechan para descansar.
Lo recorreremos entre castaños, robles, álamos, cipreses y podemos descansar en sus amplias zonas de césped, o deleitarnos en sus rosaledas, varios estanques y fuentes. En una isla se encuentra el pabellón Musical, de hierro rojo, construido en 1873, y la granja creada en 1874 transformada hoy en un merendero.
También encontramos en Vondelpark el Museo del Cine (Film Museum, junto a la cafetería Vértigo), y varias áreas de juego para los niños. Vondelpark está abierto a cualquier hora, también por la noche. En 1996 fue declarado "monumento real".
Sin duda merece la pena pasear por este lugar para disfrutar de un almuerzo, un café, del deporte, del recorrido en familia, en pareja o simplemente un momento tranquilo tumbado junto a sus estanques.
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